Al cierre de la jornada nuestra Primera se debía medir ante su par de Parquefield, rival que venia en alza, y que de obtener un buen resultado se metía en la pelea. Por todo ello era sabido que iba a ser un partido muy duro y con dos equipos que no iban a darse tregua.
Desde el inicio ambos equipos se analizaron, y a pesar de correr el reloj las situaciones de gol se hacían desear. Recién pasados algunos minutos se vieron las primeras aproximaciones a las áreas, y fue en una de ellas en las que la visita saco provecho al máximo y se puso arriba en el marcador por 1 a 0.
Con la derrota parcial y con un rival que había armado un firme bloque defensivo, para los nuestros fueron mas dudas que certezas, y los errores se repetían, situación que llevaba confianza al elenco vestido todo de negro. Fue recién a los ocho minutos, y luego de una que otra situación desperdiciada, que Náutico pudo llegar al gol, con un tanto de Santiago Rullo, que ponía el transitorio 1 a 1.
A los diez minutos, y luego de una buena jugada colectiva, Federico Aguilar estampo el 2-1 para los nuestros, gol que llevaba un poco de tranquilidad a un equipo que no estaba haciendo bien las cosas. Pero Parque no se conmovió por los dos goles y siguió intentando su juego, y cuando podía atacaba, aunque no con la claridad de los primeros minutos.
La visita siguió buscando el empate, y en una jugada muy enredada, y luego de que el balón pegara en primera instancia en el palo, logro el empate. Resultado que minutos mas tarde se volvió a modificar, cuando nuevamente el equipo vestido de negro se ponía otra vez arriba en el marcador, ahora por 3 a 2.
Con ese resultado finalizo el primer tiempo, score que tal vez fue merecido por el orden que mantuvo Parquefield en la cancha, y porque el elenco de la costa nunca tuvo ideas en como romper el cerrojo defensivo rival, y cayó en reiterados errores grupales.
Para la segunda mitad se esperaba mas de lo mismo, un Náutico protagonista que buscaría el gol por todas las vías, aunque con mayor claridad a la hora de generar juego, y un Parquefield, que, aprovechando la ventaja y la deseperacion de su rival iba a esperar un descuido para ampliar la ventaja.
Comenzada la segunda etapa el desarrollo del match fue tal como se lo analizo en el párrafo anterior, ya que Náutico buscaba el empate que no llegaba, y su rival con paciencia esperaba alguna contra para estirar la ventaja.
En uno de tantos ataques del equipo comandado por Daniel Bustos, fue Gonzalo "palma" Sangiacomo, el eterno goleador de Náutico, que haciendo gala de ese mote, desvió un remate de Juan Chung, descolocando al arquero rival, y poniendo así el 3-3. Aunque para desgracia de los nuestros la visita segundos mas tarde volvió a ponerse arriba en el match, generando un gran desconsierto en todo el equipo de la costa.
Por fortuna para los nuestros su nº 2, Juan Chung, en uno de los reiterados ataques de Náutico, en vez de buscar al compañero, eligió la personal, y saco un potente remate que inflo la red, y que significo el merecido 4 a 4.
A partir de allí el partido cayó en un transe, en el que ninguno de los dos equipos se desprotegio en su campo, y que priorizaron el orden táctico. Recién al minuto 12 Federico Aguilar, luego de tomar el balón cerca del corner, se saco su marca de encima, y de gran manera ponia a Nautico arriba en el marcador por segunda vez en el partido, ventaja que desde allí Náutico nunca perdió hasta el final.
Con el 5 a 4 a favor el equipo de calle Tuella hizo el juego que tal vez tendría que haber hecho toda la noche, y así fue que el buen control del balón, y la desesperación de Parquefield por ir a buscar un partido que había tenido controlado a lo largo de casi los dos tiempos, hicieron que llegaron mas goles de Náutico, hasta que finalizara el partido. Esos goles llegaron de la mano de Franco Vieyra (de gran partido), Gonzalo Sangiacomo y nuevamente del nº 15, Franco Vieyra.
Para Náutico es un gran triunfo, por sobre todo porque fue un partido en el que tuvo que lucharla casi siempre desde abajo, y en el que su rival le planteo una buena estrategia, que por suerte para los nuestros pudo ser vulnerada gracias a un buen juego colectivo.
